Desperdicios de alimentos a nivel global: las cifras detrás del problema

Cuando estamos terminando una deliciosa comida hecha en casa, a menudo llevamos los platos hasta el basurero y raspamos los restos sin pensar un momento. Si no es suficiente para garantizar otra porción, ¿para qué guardarlo? Esta manera casual de desechar los restos es común en todo el Reino Unido y en incontables países, ¿pero qué impacto podría tener esta pequeña acción en el problema de los desperdicios de alimentos a nivel global?

Las cifras anteriores no solo son alarmantes, sino también abrumadoras. Tirar comida es algo que hacemos inconscientemente todos los días, y aunque tomemos medidas para comprar más responsablemente y cocinar porciones más pequeñas, casi no se puede evitar tirar un poco al final del día algunas veces, especialmente si se cocina para una gran familia. Sin embargo, puede controlar cómo se maneja la comida. Imagine el bien que podría hacer con solo un pequeño cambio en la manera en que tira la comida sobrante...

Aun cuando no vaya directamente a bocas hambrientas, no tiene por qué descomponerse en un vertedero liberando gases dañinos en nuestra atmósfera. Los desperdicios de alimentos se pueden reciclar de otras maneras, desde ser utilizados como fertilizante hasta usarse como fuente de energía directa, cuando se desechan de la manera correcta.

Ahora, imagine cuán sencillo sería marcar una diferencia si pudiera desechar sus alimentos de esta manera directamente en su casa. Significaría que menos desperdicios acabarían en un vertedero, y que tendrá una cocina higiénicamente limpia y libre de olores sin preocuparse por las sobras de ayer que esperan en su basurero. Si suena demasiado bien para ser verdad, no es así. Simplemente tenemos que pensar diferente sobre la cantidad de basura que producimos, y cómo manejarla mejor día tras día.

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